Qué curiosa imagen... La cordillera, que semeja la espalda de un dragón con sus crestas, y el volcán duermen un mismo sueño: el sueño de la tierra silenciosa y sosegada, el sueño de la isla.
Muy bien escogida la foto. Pocas veces había visto una foto del Teide con ese aire de misterio.
Diría, amigo Ramiro, que se trata de una imagen tomada desde las casas de la cumbre, en Anaga. Desde allí el dragón es la montña, y la montaña, el dragón.
La imagen la tomé a la vuelta de un paseo al Teide. A través del cristal trasero del coche en movimiento, vi al dragón y al volcán, justo cuando había perdido la esperanza de verlos. Gracias a ambos por la visita.
el paisaje en movimiento el mar coronado un viento arrebatador kilómetros por hora dentro y fuera en las olas milímetros en el amor da gusto verte intermitente un tiempo para pensar para fotografiar para raptar este instante ya un recuerdo grabado en la retina y en la naríz y en el cerebro todo pasa tan deprisa el movimiento desde aquí y desde ti
El cuerpo se queda atrás cuando me muevo. ¿Quién es la que se mueve si no hay cuerpo? Es una jaula, no el cuerpo, sino la cabeza que lo piensa. Morir, pero no de cuerpo.
Comentarios
Muy bien escogida la foto. Pocas veces había visto una foto del Teide con ese aire de misterio.
Saludos.