Ir al contenido principal

Leyenda




El dragón y el volcán

reposaban juntos en el horizonte,

como bellos durmientes

a la espera de su fuego.

Comentarios

Ramiro Rosón ha dicho que…
Qué curiosa imagen... La cordillera, que semeja la espalda de un dragón con sus crestas, y el volcán duermen un mismo sueño: el sueño de la tierra silenciosa y sosegada, el sueño de la isla.

Muy bien escogida la foto. Pocas veces había visto una foto del Teide con ese aire de misterio.

Saludos.
Isidro Hernández ha dicho que…
Diría, amigo Ramiro, que se trata de una imagen tomada desde las casas de la cumbre, en Anaga. Desde allí el dragón es la montña, y la montaña, el dragón.
Pepa ha dicho que…
La imagen la tomé a la vuelta de un paseo al Teide. A través del cristal trasero del coche en movimiento, vi al dragón y al volcán, justo cuando había perdido la esperanza de verlos. Gracias a ambos por la visita.
Robanix ha dicho que…
en el interior del volcán siempre esperan los dragones a ser liberados

Entradas populares de este blog

el paseo

el paisaje en movimiento el mar coronado un viento arrebatador kilómetros por hora dentro y fuera en las olas milímetros en el amor da gusto verte intermitente un tiempo para pensar para fotografiar para raptar este instante ya un recuerdo grabado en la retina y en la naríz y en el cerebro todo pasa tan deprisa el movimiento desde aquí y desde ti

Testigo

Fui testigo de mi cárcel de palabras. Fui guardiana de mi mal. Ahora, abiertos los cerrojos en orden salen al trazo al repaso a la mirada al amor
 El cuerpo se queda atrás cuando me muevo. ¿Quién es la que se mueve si no hay cuerpo? Es una jaula, no el cuerpo, sino la cabeza que lo piensa. Morir, pero no de cuerpo.